viernes, 17 de diciembre de 2021

¿EVADIR O CONFRONTAR?





Siempre he pensado que para afrontar las situaciones complejas hay que mirar de frente el problema, con todos sus tintes y bordes afilados. Una especie de "encerrona" entre el asunto y yo.
Ahí se da el espacio de llorar, patalear y lo que sea necesario para finalmente, encontrar un punto medio o concesión que nos permita seguir adelante. Esta vez, con una mochila menos cargada que al comienzo.
Pero hace pocos días, mi percepción sobre cómo abordar los conflictos ha sido puesta bajo la lupa. Mi propia lupa, al notar que las "fórmulas" que creía infalibles (aunque siempre dolorosas) podrían estar un poco erradas (spoiler: bastante).
Pensaba que el distraerse y pasarlo bien durante un conflicto interno era una especie de "recreo" del problema central y que luego debía afrontarlo como ya sabía hacerlo. Que los momentos de risa y relajo eran pequeños "parchecitos" o pausas que solo aplazaban el inevitable momento de mirar cara a cara el conflicto.
La costumbre de estar sola y la certeza construída de "poder sola con todo", estaban nublando mi juicio y poniendo una sombra ingrata sobre la ayuda desinteresada que recibía de los demás.
Una salida, una conversación o una invitación a tomar oncecita. Cualquier cosa que nos abrigue un poco el alma podía tener este "potencial sanador" y no lo estaba notando y por ende; subestimando.
Confrontar algo no siempre debe ser un acto solitario o completamente doloroso. También tiene sus tintes variados, así como la vida misma.
Aceptar ayuda o pedirla es tan necesario como respirar, aún más en momentos donde nos vemos sobrepasados emocional o psicológicamente. Somos seres sociales y está en nuestra naturaleza (nos guste o no) el compartir con el otro.
Distraerse no necesariamente significa evadir si das espacio para tratar ese conflicto en algún momento.
Ya luego podrás volver a la situación con otro aire y abordarlo con energía renovada o menos carga emocional negativa.

A veces es mucho más sano revisar nuestra carga y repartir (compartir) el peso.

Sepan perdonar mis redundancias y falta de claridad al redactar esto, yo también estoy aprendiendo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario